Mucho se ha hablado estos últimos días sobre la seguridad global de las infraestructuras de red tras el último ataque a nivel mundial sufrido. Un ataque de estas características, como sabemos, puede afectar tanto a grandes empresas como a nuestros PCs domésticos. Si este es nuestro caso, recomendamos aumentar la seguridad del equipo con Windows Defender.
En cualquiera de los escenarios un punto importante de entrada de malware, virus u otro tipo de software malicioso son los puestos de trabajo de los usuarios. Hemos de ser conscientes que, en ocasiones, podemos ser objeto de recepción de correos, acceso a webs o visualización de mensajes en pantalla que colocan en una encrucijada al usuario por no saber que hacer o responder.
Ahí es donde entra el administrador de Ti para aprovechar todas las herramientas de las que dispone para reforzar la seguridad. Y por supuesto, una de ellas es Windows Defender, integrado con Windows 10.
La adopción de Windows 10 por parte de las empresas está siendo pausado. Poco a poco se está imponiendo pero todavía hay empresas que han aparcado el cambio. Se estima que unos 50 millones de PCs corporativos tienen ya Windows 10 instalado y corriendo en sus equipos. Cada vez son más, pero el proceso está siendo algo lento.
La adopción de un sistema operativo de última generación es fundamental para estar protegidos ante las nuevas amenazas de seguridad, entre otras cosas. Como decíamos antes, al administrador de TI ha de usar todas la herramientas de las que dispone para defender los datos y el funcionamiento de la infraestructura de red. Y sin duda, una de ellas es Windows Defender.
Windows Defender para Windows 10 es una solución bastante operativa y que ofrece buenos resultados, bien usada y configurada. Al estar integrado con el sistema operativo no consume grandes recursos. Además, con la última actualización de Windows 10, Creators Update, Microsoft le ha dado un lavado de cara y la ha convertido en una suite de seguridad con multitud de opciones, capaz de proteger el equipo de diferentes amenazas y solucionar posibles problemas rápidamente.
A parte de esto, ofrece la posibilidad de proteger el equipo de amenazas de la nube. En multitud de ocasiones hemos hablado aquí de las bonanzas de usar servicios en la nube y del nivel de protección que ofrecen sus accesos, sobre todo los ofrecidos por Microsoft. Pero la proliferación de su uso requiere de que las herramientas de protección también se orienten en este sentido. Así, con Windows Defender podemos proteger nuestros equipos usando la nube.
Aún no hay un lugar en Windows Defender donde activemos esta protección, pero sí podremos hacerlo modificando diferentes elementos en el registro del equipo. Para obtener el procedimiento de activación, puede ponerse en contacto con nosotros y le enviaremos el proceso de activación de estas protecciones.
El asunto de la seguridad es vital para proteger nuestros archivos. Da igual el tamaño de nuestra empresa o el número de equipos que administremos. Hemos de estar siempre protegidos y al día con las opciones de protección que disponemos. Por ello, en conjunción con nuestros sistemas de seguridad de que dispongamos, podemos usar Windows Defender como medida adicional para proteger nuestra infraestructura de red.